Por Sonia Edith Acevedo Rodríguez///Semillero65
Ciudad de México,(14-08-2024).-Y si además de cuidarnos para tener en envejecimiento activo con una óptima calidad de vida, también debemos cuidar a alguien más como nuestros padres, pareja, hijo, algún conocido o familiar. ¿Qué debemos hacer? ¿Cómo podemos resolver ese gran conflicto? Si es verdad si es tan difícil ocuparme de mí, ¿como voy a ocuparme de alguien más? El solo hecho de pensar todo lo que debe de realizar para ser activo en mi vejez hasta cierto punto me entristece y lo justifico para evitarte tener esta emoción. Al saber o pensar en cuidar a alguien más, el miedo y mi paciencia se agotan. ¿Cómo ayudar a alguien más cuando no se como ayudarme a mi mismo?
Antes que nada, debemos ser conscientes de que todos, en algún momento de nuestra vida, vamos a o quizá ya la requerimos. Si lo se, es algo muy difícil de aceptar, especialmente cuando somos independientes y estamos acostumbrados a hacer todo poe nosotros mismos. Sin embargo, no debemos hacernos los fuertes; es mejor pedir ayuda cuando la requerimos para evitar complicaciones. No debemos aferrarnos a hacer algo que se nos está dificultando, ya que puede resultar contraproducente.
Hace unos días, mi mamá se golpeó fuertemente la frente, como, según ella ya era algo “tarde” para incomodar (después de las 10pm), decidió no decirnos hasta el siguiente día. Y eso fue porque nos percátanos al verla del gran golpe que traía y que, conforme pasaron los días, se convirtieron en moretones de todos los tamaños que se extendieron por toda la cara.
Este golpe en la frente se debió a que su visión a disminuido. La necesidad del uso de lentes nos sorprendió, ya que no sabíamos que estaba teniendo esta dificultad hasta que se golpeó. Una limitación visual que ha desarrollado y a la cual no se le había dado una solución debido a que no teníamos conocimiento de ella. Un golpe que m mamá pudo evitar si, desde el momento que presentaba dificultades visuales nos hubiera dicho.
Las limitaciones que se van presentando es un tema difícil de tratar tanto para uno como para un adulto mayor, debido a que estas pueden ser físicas, de salud, visuales, de movimiento, entre otras (Maragall, 2024; IMSS, 2012). Todos en algún momento hemos olvidado algo, ya sea que en una plática no recordemos el nombre de alguien o quizá se nos pasó realizar un pago, pero después de rato lo recordamos, lo cual, hasta cierto punto, es “normal”. De la misma manera ocurre con la movilidad, conforme se envejece uno se va volviendo lento, la audición y las ganas por realizar actividades disminuyen, pero luego regresan para continuar con nuestra rutina. Sin embargo, ¿qué pasa si no esto sucede?
¿Y si por mas que se intente ya se necesita de ayuda para realizar las actividades básicas, como: regresar a casa por sí mismo, cuidar la higiene, alimentarse o conducir? También el confundirse constantemente con nombres, lugares, tiempo, o incluso no saber cómo utilizar dispositivos que se manejaban con frecuencia, como televisión, la radio o el teléfono, son señales claras de que se requiere cuidado y atención médica especial.
Recordemos que nuestro cerebro, al igual que nosotros, también envejece. Hasta cierto punto, el deterioro cognitivo leve que el adulto mayor puede presentar no marca una severidad grave, ya que, mediante su cuidado, continúan realizando sus actividades diarias. También puede ser el indicio temprano de la enfermedad de Alzheimer, la cual es una enfermedad incurable que se caracteriza por la pérdida de memoria siendo la principal causante de la demencia (Instituto Mexicano del Seguro Social [IMSS], 2017). Cuando llegamos o estamos en este momento de vida, se requiere de una persona encargada de brindar apoyo a la persona que lo necesita, conocido como cuidador. (Organización Panamericana de la Salud [OPS], 2023). Posiblemente tú seas este cuidador.
Si después de estresarte un poco al pensar en los olvidos más frecuentes que has tenido, y de acordarte del familiar o conocido que requiere de tu ayuda “extra” como la de un cuidador, es momento de ser conscientes de los cambios que puedes y/o debes implementar, tanto para tu cuidado como para el de alguien más. Por lo que, a continuación, te mostraré situaciones de cambio que, hasta cierto punto, pueden ser fáciles, y que por lo mismo, no pensamos en ellas:
Oportunidades de mejora
- Aceptar los cambios: los cambios a la mayoría de las personas nos dan miedo, aún cuando todos los días se presentan. Es diferente el no querer aceptarlos a que tu cuerpo día a día los presenta. Si no me crees, piensa en el cambio del día de hoy, por mínimo que esté fuera. Si no tienes ninguno, puedes ver tu rostro: esta triste, alegre; este es un cambio, ya que ayer tu estado de ánimo no fue el mismo.
- Ser paciente: no te convenzas ni intentes convencer a la persona que estás cuidando de que ella se debe cuidar o de que le estás o que te estás haciendo un favor al cuidarte. Conforme transcurra el tiempo, cada quien se va a percatar, gracias a la cordura y calma que se mantuvo y demostró (Hogar día mi casa, abril 2023).
- No hacer todo por la persona que se cuida ni permitir que nos hagan las cosas: si lo admito, es placentero saber que ya te hicieron una tarea o actividad del día. Esta ayuda a veces se vuelve contraproducente: si nosotros la realizamos continuamente para ayudar a la persona que estamos cuidando, solo lograremos volverlo apático y nosotros nos cansaremos e iremos perdiendo nuestra paciencia. En este punto, debe existir claridad y equilibrio en el momento de ayudar al adulto mayor o permitir que nos ayuden.
- Informarte continuamente: el estar actualizado sobre las actividades que puedes realizar para tener un óptimo envejecimiento te ayudara a contar con una buena calidad de vida, tanto tuya como de las personas que te rodean.
- Detectar las necesidades no cubiertas: el comportamiento que vamos teniendo es la consecuencia de esa necesidad no cubierta. Existen necesidades que expresamos y otras que no, pero mediante la observación y apoyo podemos detectarlas. En mi caso, mi mal humor es muy notorio cuando tengo hambre, en cambio, a mi mamá él hambre la hace llorar. Otras personas necesitan que les administren medicamentos o los acompañen a sus citas médicas, una necesidad que a veces, por pena, el adulto mayor no mencionara o simplemente olvidará (Hogar día mi casa, abril 2023).
Continuar con tu vida habitual te ayudará a ser independiente, por lo cual es prescindible que cuides tu alimentación, hagas algún tipo de ejercicio, convivas con familiares, amigos, mantengas en forma tu cerebro e intentes realizar tus actividades cotidianas con precaución.
Si ayudas a alguien más, no hagas todo por esa persona. Mejor ocúpate en percatarte de los lugares que se requieren modificar para brindar seguridad y facilitar el día a día de las personas mayores, como el baño, la cocina, quitar escaleras; implementar rampas. El cuidar a alguien más, aparte de brindarles compañía, proporcionarles ayuda en casi todos los aspectos ya sea emocionales, de higiene, movilidad, salud, etc., también brinda confort, pero, sobre todo control de emociones y cuidado de uno mismo para un futuro.
Un futuro para el cual se busca concientizar a la población sobre la importancia, cuidado y respeto que se le debe otorgar al adulto mayor, con su celebración del 28 de agosto con el Día Nacional de las Personas Mayores, en la cual no solo pone de relieve proteger y ofrecer asistencia a las personas mayores, sino que también se reconoce la importancia de los cuidadores para mejorar su calidad de vida (Gobierno del Estado de México, 2024).
Ideas finales
El que olvidemos las cosas es “normal”, siempre y cuando, después de tiempo, las recordemos. Es momento de empezar a preocuparnos y buscar soluciones cuando nos percátanos que algún conocido no tiene memoria, ya que no tiene ni idea del día o lugar en el que se encuentra, así como la dificultad que presenta al realizar actividades básicas como alimentarse, bañarse, moverse o hablar.
Recuerda que cuidar bien no es hacer todo por alguien, es ayudarlo a que continúe y/o continuemos realizando las actividades acostumbradas, siempre con educación, paciencia e información. No olvides que el pedir ayuda no te hace vulnerable, más bien demuestra que eres consciente y estás cuidándote para evita daños o accidentes futuros que puedan disminuir tu calidad de vida. No te desesperes, mejor busca soluciones que faciliten tu día a día.
Para más información:
Fundación Pasquall Maragall, (2024). Hablemos de Alzheimer. Recuperado de https://blog.fpmaragall.org/deterioro-cognitivo-leve
Gobierno del Estado de México, (2024). 28 de agosto, día del adulto mayor. Recuperado de https://edomex.gob.mx/adulto_mayor
Hogar día mi casa, (abril, 2023). ¿Qué es ser cuidador? Descubre le importancia de cuidar adultos mayores. Recuperado de https://hogardiamicasa.com/que-es-ser-un-cuidador-descubre-la-importancia-de-cuidar-a-los-adultos-mayores/
Instituto Mexicano del Seguro Social [IMSS], (2012). Diagnóstico y tratamiento del deterioro cognoscitivo en el adulto mayor en el primer nivel de atención. Guía de referencia rápida. Recuperado de https://www.imss.gob.mx/sites/all/statics/guiasclinicas/144GRR.pdf
Instituto Mexicano del Seguro Social [IMSS], (2017). Diagnóstico y tratamiento de la enfermedad de Alzheimer. Recuperado de https://www.imss.gob.mx/sites/all/statics/guiasclinicas/393GER.pdf
Organización Panamericana de la Salud [OPS], 2023. La situación de los cuidados a largo plazo en America Latina y el Caribe, Recuperado de https://iris.paho.org/bitstream/handle/10665.2/57356/9789275326879_spa.pdf?sequence=1&isAllowed=y#:~:text=De%20acuerdo%20con%20la%20Organizaci%C3%B3n,en%20general%2C%20no%20recibe%20remuneraci%C3%B3n.
