lunes, abril 28, 2025
No menu items!
HomeCuéntame como pasó?Raquel y su lucha de amor por Ricardo "El Rustie", más allá...

Raquel y su lucha de amor por Ricardo “El Rustie”, más allá de la muerte

Por Gerardo Romo/// Semillero65

Zacatecas, (14-02-2025).-El amor de Raquel Cruz Hernández y Ricardo Reyes Mata El Rustie es para la eternidad. Y aquí en la tierra, de lucha por la justicia y dignidad, de quien murió dándolo todo por la revolución de las conciencias desde la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ) y en 2001, tras fallecer, la institución le dio la espalda, como si nunca lo hubiese conocido.

“Yo voy a seguir luchando porque se haga justicia para mi esposo, así sea lo último que haga en mi vida”, dice Raquel, su esposa, jubilada de la UAZ desde 2008.

Ricardo, tras 30 años de servicio como docente de prepa, murió sin recibir ninguna de las prestaciones económicas que acumuló en vida y a las que tiene derecho incluso después de morir y por lo que su esposa Raquel persiste incansable.

Sus exigencias fueron ignoradas por 5 ex rectores de la universidad, Rogelio Cárdenas (ya fallecido y de quien fue asesor y amigo cercano), Alfredo Femat, (actual diputado local petista), Francisco Javier Domínguez Garay, quien de repente, (apenas hace 72 horas) dice defender a maestr@s y jubilados, Antonio Guzmán, (ex lider sindical), Armando Silva y Rubén Ibarra Reyes, vigente rector de la universidad.

Todos ellos, sabiéndolo o no; son beneficiarios de la lucha del profe Ricardo quien en vida fue impulsor de la defensa de los trabajadores como hombre de izquierda radical, de esa que sabe que no se puede ser feliz solo y que los cambios se generan en beneficio de la colectividad, sobre todo de la más desprotegida.

“Seis rectores me han traído llevando y trayendo papeles de una oficina a otra ignorándome a mi y a Ricardo, quien me acompaña en esta lucha como lo hizo en vida”, dice la enfermera jubilada experta en curar las heridas de otros, pero que ha aprendido a vivir con la suya en el alma producto de la indiferencia de quienes ostentan un poder que en realidad no les pertenece.

El cálculo monetario de lo que le deben a su esposo es hoy para Raquel, lo menos importante, antes bien desea transmitir a sus compañeros profesores, profesoras y alumnos de la universidad que la lucha con causa cambia el sistema, aunque éste se resista y que el motor de esa lucha, como de todo lo bueno, es el AMOR, así con mayúsculas.

La vida juntos

Ricardo, El Rustie y Raquel se conocieron en las asambleas en defensa de las y los profesores de la UAZ que se hacían en enfermería.

“Uyyy siempre lo recuerdo, como un hombre congruente, de izquierda, era un pacifista muy comprensivo y tolerante, tuvimos una relación de 20 años, tenemos, tres hijos, él sigue con nosotros”.

“En 1980 nos fuimos a Cuba, uno de sus sueños era conocer la isla y lo vivimos juntos; él anhelaba estar ahí porque conocía la historia de la revolución Cubana y lo que generó para el mundo;él fue un intelectual al cien por ciento, asesoraba movimientos sociales, fue fundador e ideólogo del sindicato de profesores y profesoras de la universidad”, rememora orgullosa.

El Rustie fue inquieto desde niño y educado por los jesuitas, en un internado del municipio de Guadalupe. ¡Imagínese! exclama Raquel.

Ella cierra por un momento los ojos, instante que le basta para traer al presente esas laaargas noches mexicanas que Ricardo escribiendo artículos, reflexionando sobre lo que leía y desde luego haciendo propaganda de las ideas Troskistas que enarbolaba en busca de hacer cumplir los derechos de trabajadores y trabajadoras dentro de la universidad y fuera de ella.

También evoca lo común que era para su esposo pasar mucho tiempo haciendo lonas, volantes para los mitines en los que participaba con fervor.

“Tengo muchos artículos que el escribió, pero sobre todo muchos cassettes con infinidad de sus charlas, reflexiones y diálogos, porque mucho tiempo el tuvo un programa de radio los domingos donde transmitía sus ideas y cómo veía el mundo”. El problema es que esos casettes ya no tiene cómo reproducirlos para escucharlos.

La piel de Raquel se enchina cada vez que su memoria le hace respirar el compromiso social de Ricardo, quien fue muy cercano a Rosario Ibarra de Piedra, y Heberto Castillo, con quien compartió trinchera política en el Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT) y mantuvo una profunda amistad con Adolfo Gilly a quien en varias ocasiones llevó a la UAZ

Raquel sabe que si el destino se hubiera invertido siendo ella quien falleciera bajo el mismo yugo del patrón opresor que ignora a sus trabajadoras en vida y aún en la muerte, Ricardo pelearía de la misma manera que hoy ella lo hace en su ausencia.

Y no descarta plantarse afuera de rectoría de la UAZ para hacerse escuchar. Hoy ella siente el respaldo de los agremiados al sindicato como coherederos y coherederas de las batallas colectivas de El Rusty.

“Me siento muy apoyada por él, siento que tengo su luz para seguir adelante”, admite Raquel Cruz Hernández, la enfermera de fuerza infinita.

Tercer Congreso Nacional del PRT del que Ricardo Reyes “El Rustie” formó parte
ATICULOS RELACIONADOS

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here